¿QUÉ SE SENTIRÁ MIRAR AL SEÑOR CARA A CARA?
Cómo será adorar a Dios en el cielo? Pienso que será algo tan sublime, que solo podemos imaginarlo. La canción del siguiente video, CARA A CARA, nos describe de manera poética, lo hermoso que será disfrutar del enorme privilegio de contemplar al Señor, frente a frente, y de entregarle allí mismo nuestra adoración.
Verán aquí dos versiones del mismo tema. En un caso, la versión de Marcos Vidal en un concierto en vivo, desde España. Y la otra versión, interpretada por el grupo vocal Amanecer, con énfasis en la interpretación vocal, cantando a varias voces en un hermoso acoplo.
Los dejo con estos dos videos y les invito a meditar en la letra de esta canción, imaginándose a ustedes mismos en esta escena, cara a cara frente al Señor. Ojalá ese sea siempre nuestro ferviente anhelo: llegar a contemplar al Señor.
Para recordar:
“Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es. Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro.”1 Juan 3:2-3
1. CARA A CARA
(Intérprete: Marcos Vidal)
( Si no te aparece este video, MIRA AQUÍ )
2. CARA A CARA
(Intérprete: Amanecer)
( Si no te aparece este video, MIRA AQUÍ )
Letra de CARA A CARA
Solamente una palabra, solamente una oración,
cuando llegue a tu presencia, oh Señor.
No importa en qué lugar de la mesa me hagas sentar,
o el color de mi corona, si la llego a ganar.
Solamente una palabra, si es que aún me queda voz,
y si logro articularla en tu presencia.
No te quiero hacer preguntas, tan solo una petición,
y si puede ser a solas, mucho mejor:
Solo déjame mirarte cara a cara
y perderme, como un niño, en tu mirada.
Y que pase mucho tiempo y que nadie diga nada,
porque estoy viendo al Maestro, cara a cara.Que se ahogue mi recuerdo en tu mirada.
Quiero amarte en el silencio y sin palabras;
y que pase mucho tiempo y que nadie diga nada.
Solo déjame mirarte cara a cara.
Solamente una palabra, solamente una oración,
cuando llegue a tu presencia, oh Señor.
No importa en qué lugar de la mesa me hagas sentar,
o el color de mi corona, si la llego a ganar.
Solo déjame mirarte cara a cara,
aunque caiga derretido en tu mirada.
Derrotado y desde el suelo, tembloroso y sin aliento,
aún te seguiré mirando, mi Maestro.
Cuando caiga ante tus plantas, de rodillas,
déjame llorar, pegado a tus heridas.
Y que pase mucho tiempo y que nadie me lo impida,
que he esperado este momento toda mi vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¡NOS ENCANTARÍA CONOCER TUS COMENTARIOS!
-----------------------------------------------------------
Si no tienes perfil, usa la opción Nombre/URL, con tu nombre o pseudónimo (La URL es opcional).